miércoles, 29 de septiembre de 2010

Sentires y pensares: testimonios de mujeres que tuvieron (y tienen) doula.

El lindo mail de Cinthia fue un incentivo para comunicarme con Uds. Tarde, pero a tiempo.

Gracias Cinthia por tan lindas palabras. No dejan de traerme recuerdos de hace tan solo 60 días cuando parimos a Leah.

Estoy totalmente de acuerdo con Cinthia. Acceder a información como la brindada en MaterPater es fundamental para transitar el embarazo pero contar con una Doula aporta un invaluable valor agregado una vez desencadenado el preparto; y después.

Hay tantos asuntos para los que como rutina y aveces sin siquiera darnos cuenta, pedimos asesoramiento y/ó apoyo; desde alguna duda laboral, la planificación de un viaje, un entuerto amistoso ó amoroso, algún malestar físico y hasta para elegir un jean ó un restaurante el sábado a la noche... pero claro, parir, comparado con todos estos aspectos no merece tanta elucubración, si es una pavada ¿no? Simplemente con elegir un médico de la cartilla de la obra social, casi al azar, e inscribirse en el primer sanatorio que me figura en el catálogo que recibo a domicilio me asegura un parto exitoso o eventualmente, que da igual, una cesárea que de todos modos queda por debajo de la línea de la bikini asíque nadie la ve... En fin, para muchas personas que transitan en nuestras calles esto es así, me consta, pero para Uds. que ya pidieron auxilio a expertos ya atravesaron una línea que no tiene vuelta atrás. Solamente la jerarquización que le dieron a esta instancia única de la vida, los deja en un punto diferente al resto. A partir de ese momento, y lamento pero debo discriminar: somos nosotros y ellos. Y a medida que pasa el tiempo y las distintas fases del proceso de dar vida y seguir viviendo se van acumulando (a paso redoblado) mas diferencias con "ellos". Ya verán.

Entonces, estamos transitando otro camino. Sépanlo.

Les advierto, aunque tal vez ya se dieron cuenta, que en este camino hay desde el comienzo una búsqueda importante de como brindarse al ser que gestamos: incondicionalmente, sin espectros claros de tiempo y espacio. Para lograr esto recorremos nuestros intrincados laberintos interiores. Ahondamos en torpezas del pasados, nuestras y ajenas. Cedemos a nuestros miedos y nuestras culpas. Nos apropiamos nuevamente de nuestros cuerpos y los ablandamos ya que en algún momento fueron capturados y transformados en robots. Toleramos ser criticados y tratamos que no nos identifiquen con marcianos.

Que quede claro que este es el camino más largo, no es fácil, pero tiene su beneficio posterior. En el paso encontramos más lágrimas pero también más profundas alegrías. Encontramos trabas y oposición pero esto nos da certezas imprevistas. En el camino nos cruzaremos con el espantapájaros, el hombre de lata y el león y es así que saldremos más reflexivos, más amorosos, más corajudos. Este es el camino de las hadas buenas y las Doulas y nosotros somos de los que parimos angelitos ya que desde que son panza los atendemos entre nubes de algodón.

Por eso es importante contar con apoyo.

Porque el camino nuestro al no ser el convencional, no tiene contención y para "ellos", no tiene contenido. Manejás códigos poco frecuentes en nuestra sociedad actual. necesitas aunque sea un socio, que puede ser tu marido... pero además una socia, una aliada en los rebusques femeninos.

Además, para nosotras este es el primero, segundo ó tercer parto pero para las Doulas este puede ser el parto número 40 ó 100... además del/ los suyo/s propio/s que hace válidos todos lo demás.

Cuando comienzan las contracciones una esta dolorida. La espalda, la pelvis, el vientre... todo es una misma parte del cuerpo y todo pareciera doler. Tanto, que ni sabes donde. Pero el dolor no duele realmente. Es extraño, más bien te marea y te transporta. Tiene como un efecto somnífero. Ya no recordarás todas las recomendaciones que te hicieron solo hasta un par de horas antes. Se desencadena una catarata de incertidumbres. Unapadeceunaamnesiayentraenunaespeciedetrance. Sabemos que solo faltan unas horas hasta el cambio de nuestras vidas. Como si de repente, a pesar de que lo elaboraste durante esos nueve meses, te dieras cuenta por primera vez que estás cerca de una metamorfosis, porque una vez que das vida, nada vuelve a ser igual. Estás a pocas horas de transformarte en mamífero, a punto de tener un cachorrito que transformará tu andar hasta el resto de tu vida. Entonces, como tan animal (!) no sos alguien te tiene que sostener. Sostener no solo el sacro que pareciera que se desvanece, sino también la cabeza, porque ésta esta cerca de caer. De verdad.

Si hubiera creído esto a tiempo, que más de una mujer me lo trató de transmitir, no hubiera tomado decisiones tan de último momento que dejaran varias puntadas sin hilo. Para cuando decidí que quería contar con una Doula, había cosas que no estaban bien encaminadas y parecía tarde para reevaluar. Una vez iniciado el trabajo de parto en casa, todo fue aconteciendo en una secuencia vertiginosa en donde los hechos se anteponían a las decisiones. La noche transcurría antes del atardecer y la madrugada antes que la noche. Algo así. Todo fue pasando tan de repente que para cuando llegué al momento de salir de mi casa para el sanatorio me di cuenta que no me quería ir, que me hubiera gustado parir ahí, tenía Doula, pero no tenía partera. No había tiempo para reorganizar prudentemente. Para cuando llegué al sanatorio me dí cuenta que mi Doula no estaba autorizada para presenciar el parto. Repentinamente perdí a mi Doula en un pasillo; quedábamos Guido y yo con las cabezas dadas vuelta y a solas. Para cuando me hicieron la episiotomía me di cuenta que no había insistido lo suficiente en que no me la hicieran... y cuando me la entregaron a Leah entoallada, segundos después del parto...no había nadie que me entendiera porqué la quería desarropar.

Pero bueno, todo es lección. No temer a lo bueno es la enseñanza.

Hoy a casi 60 días de haber parido estoy con mi pequeñina colgada de una teta. Desde que salí de la sala de post-parto que la tengo colgada. Cuando reviso las estadísticas y verifico que son cada vez menos las madres que se dignan a amamantar entiendo que aquí intervinieron algunas abras cadabras de la Doula. Estoy segura.

En ese torbellino de acontecimientos aquel 20 de mayo en el que yo parí, no olvido una imagen recurrente. Guido la traía a Leah a la sala donde me habían trasladado luego de que me cosieran la episiotomía como un matambre. Apenas lo vi a Guido con el paquetito envuelto en blanco me emocioné pero entré un instante en pánico: "y ahora?!". Melina arrebató a Leah de las manos de Guido y sin que yo tuviera tiempo de preocuparme por recordar el manual de instrucciones, me enchufó a Leah en la teta. Acto seguido la imagen es de la chiquita succionando. Ojos cerrados y boquita envolviendo mi pezón, ella mamaba y yo por primera vez amamantaba. Brillantes ambas.

Sin Doula, me consta, ni esto hubiera sido tan facil ni tampoco el resto del proceso de lactancia. Cuando baja la leche... que no baja. Y cuando después por fin que baja y tan rápido y en tanta cantidad que tus tetas se convierten en barriles a punto de estallar y que si no las liberas te puede agarrar mastitis que el solo nombre te asusta mas que el sarna y para la que no hay ni morfinas ni inyecciones posibles solo una buena ordeñada pero nunca nadie te advirtió que te convertirías en vaca de ordeñe entonces tus manos no responden porque nunca nadie te enseñó que hacer...y ahí, aparece tu Doula, que te tranquiliza y te da la instrucción que te había dado mil veces antes pero que hasta que no estás viviendo la situación tal vez ni prestaste atención, ó sí, pero parecía tan ajena que no la registraste. Y ahí me encontraba en el baño, con una palangana sobre mi falda, bamboleando una teta que no conocía (pero estaba agarrada a mi cuerpo asíque sin duda era mía).

Y ahora cuando doy la teta parece como si toda la vida hubiera dado leche a un bebé. Hasta no entiendo (y peor; no tolero) cuando una mama me cuenta que no puede amamantar. Me suena a imposible no poder amamantar. Creo que estas mujeres se deben sincerar. No quieren amamantar porque hay otras prioridades. (A veces sin embargo hay impedimentos reales de amamantamiento, aunque son en un porcentaje bajísimo).

Y así pasan los días y las noches. Entre leche y pañales y llantos y leche. Entre sueños y pesadillas. Con un hijo a bordo de tu vida, que no se piensa bajar. Un hijo que no querés que se baje jamás.

Con Leah, mi hija, colechamos. Solo los primeros 5 días durmió en su cuna. Una cuna sin barrotes totalmente pegada a nuestra cama, con una misma sábana vinculando los colchones. La 5ta noche pasó lo increíble. Ella, tan chiquitita se había dormido a las 2:00am en su cunita. Yo me quedaba dormida a unos 60cm de ella, mientras la admiraba desde mi cama. Tres horas más tarde, me despierto para descubrir que Leah había reptado (*) a mi encuentro y se encontraba placidamente acurrucada contra mi cara. Era tan evidente su pedido. Me necesitaba. Necesitaba estar así de cerca de su mamá. Todavía no habla pero su cuerpito lo expresa todo. Yo la entendí, y desde la noche siguiente duerme con nosotros. Aveces en un rinconcito del colchón, aveces arriba mío. Es lo más tierno que te puede pasar. Dormir con tu bebé. A pesar de las contraindicaciones de los parientes cercanos y lejanos también, intuyo que sin duda es bueno para él pero te aseguro: alucinante para vos... a pesar de los dolores de espalda por dormir con el cuerpo todo torcido.

(*) Sí, yo también pensé que en mis sueños livianos y algún quejido de ella yo la había trasladado contra mí. Pero la noche siguiente se repitió la escena, pero esta vez yo aún no dormía y pude ver como la pequeña con todo el esfuerzo de sus coditos y sus piernitas reptaba hasta acomodarse a mi lado. Fue una sorpresa para mí también.

Aparte de dar leche y dormir no hay mucho más en tu vida. Sí, los pañales. Esta tarea es una de las tareas nuevas que te acontecen y no es la más deseada. También las noches de insomnio y las ojeras. Las canciones de cuna que te aprendes de memoria y te persiguen durante todo el día. Las duchas de dos minutos y tres segundos. Las cenas recortadas. Los vecinos molestos... no mucho más, y sin embargo; todo.

Entendés que dar vida es el significado de la vida misma. Todo aquello que algún día no tenía mucho sentido empieza a ordenarse desde que nace una nueva vida desde tu propia vida. Y te das cuenta que sos parte de una inmensa cadena de madres que antes que vos, parieron a madres que antes que vos parieron. Y ves hacia atrás pero también para adelante, sobretodo porque Leah es niña y pienso que algún día, tal vez, si Di-s quiere también va a parir. Entonces, de repente, vos tan insignificante en esta inmensidad, te transformás en el eslabón perdido.

...
(Diana Ellmann)

Este es el mail de Cintia

Hola compañeros de Materpater!

Les escribimos con Andy para saludarlos, agradecerles sus mails, contarles un poco nuestra experiencia y mandarles dos fotos. La que está Inés sola la sacamos ayer, es decir, ya de tres semanas. La otra la sacamos a la semana y media de Ines.
Estamos los tres muy bien y adaptándonos mutuamente, conociéndonos cada día mas y contentos de tenerla ya en nuestros brazos.
Sé que cada uno va a hacer su propia experiencia pero, algo que sí me siento en la obligación de decirles, es que todas las mujeres que parimos deberíamos tener una doula al lado. Fue fundamental tener una doula, que en nuestro caso fue Mel, tanto en los días previos al parto, durante el trabajo de parto (FUNDAMENTAL!), el parto y el postparto. Gracias a ella no me hicieron episiotomía y forceps! Estaban a punto... Se fueron todos de la sala de partos, quedamos con Andy y Mel.. Me dijo Mel que siga pujando y de golpe coronó y Andy tuvo que llamar a las corridas a la partera y al obstetra que estaban llenando unos papeles para la episiotomía y forceps! Ni ellos podían creer lo que había pasado. Nació con dos vueltas de cordón! Pero de lo mas bien! Y todo eso gracias a mi doula!
El trabajo de parto fue intenso y revelador..el haber sido acompañada por una doula en estas largas horas fueron de gran sostén tanto físico como emocional. Tengo que aclarar que no suplanta el rol del marido y eso Andy se los puede reconfirmar. La presencia de una mujer que ya parió, como una lo está haciendo en ese momento, que la entienda y contenga como mujer que pasó por lo mismo y sabe lo que se siente, fue realmente importante.
Espero que tomen mi recomendación que es de corazón ya que todos ustedes son personas que están preparadas y merecen no perderse la oportunidad de vivir está experiencia acompañados de alguien que los va a hacer sentirse mas acompañados, contenidos y para la mujer en especial, entendidas! Les mando un beso gigante a todas esas panzas lindas, a las futuras mamis y papis, a los que ya fueron mama y papa, y otro gigante a vos Mel, que si no fuese por vos, la historia hubiese sido otra.
Cintia y Andy

domingo, 26 de septiembre de 2010

El juego de los miles de (t)errores

hola!
quiero proponerles un juego. entren en el sitio, miren el producto y sobre todo miren el video de demostracion.

http://www.elcorteingles.es/multitienda/producto/producto.asp?hddref=124635

yo encontré estos errores:

1- la mujer nunca parió. ni tuvo cesárea. no es madre, bah. y es preocupantemente anoréxica.
2- obviamente esa mujer no es la mamá de ese bebé. ninguna mamá tiene ese aspecto. sin embargo, debo reconocer que tiene un gran dominio de su gestualidad. felicitaciones al entrenador.
3- otro detalle de la mujer es que cuando está sin el bebé, tiene más escote (¿será para entusiasmar a los posibles compradores masculinos?) en cambio, cuando está con el bebé, tiene el escote cubierto.
4- el bebé está dormido durante toda la publicidad.
5- nadie lo mira (bueno, es un producto para abandonar y desamparar al bebé), nadie le habla, y si hubieran utilizado a un muñeco hubiera sido exactamente lo mismo.
los bebes sonríen cuando duermen, si se sienten bien.
6- este bebé no sonríe en ningún momento, tiene rostro con ceño fruncido y boca en "u". por lo tanto si querés verificar que sea un produco apropiado, si bien no llora, tampoco se muestra feliz.
7- "la madre puede hacer cualquier cosa, menos estar con el niño".
8- no se pierdan el punto de los botones con las opciones de sonido de corazón, pajaritos, y mp3.
9- viene con mordillo y orejas de osito, ¡su hijo estará encantado!
10- el mensaje es mas o menos así: "obtenga un hijo, y luego obtenga esa sillita". ambos son adquisiciones y no necesitan mantenimiento si los adquirió al mismo tiempo.

efectos colaterales:
1- hijos disociados de por vida, con dificultades graves en los vínculos, en el lenguaje, en la motricidad y en el desenvolvimiento en general.
2- personas altamente manipulables, dependientes (de otros, de medicamentos y de cualquier cosa que los convierta en consumidores) e infelices.
3- dependencia (de los padres) de por vida para tener que ocuparse del engendro que ud misma/o generó.
4- fortunas gastadas en terapias que jamás restaurarán el daño inicial.
5- no se aceptan devoluciones. lo comprás, te jodés.

otra cosa que me sorprende es que te lo venden como si tu bebé fuera realmente un muñeco y fuera a ser bebé toda la vida, y no toman para nada en cuenta la evolución que desarrolla un bebé en pocos meses. lo muestran más como un adorno que como un ser humano. de terror...

bueno, a divertirse con el jueguito!
besos
mel

y ya hay participantes que aportaron lo suyo:

marcelo: uauu.
Al principio pensè que era una joda, pero no....es real, la realidad supera la ficciòn...

diana: Es verdad, si hubiera sido un muñeco hubiera sido lo mismo...
A partir de esta frase de Melina se me ocurrió un gran negocio (con acento...). Consiste en fabricar muñecos que hacen de niños. Para qué seguir fabricando niños que hacen de muñecos. Imaginen uno que a botonera balbucea, llora, grita ó duerme. Los mas sofisticados hasta podrían hacer sonrisitas cuando duermen para mostrar satisfacción. Si le apretás la panza, dependiendo de que costado, hacen pis ó caca. Algunos podrían rolar al mejor estilo Pikler. A la noche, antes de irte a dormir lo desconectas y soñas tranquilo. Hasta podés colechar ya que ni como fantasía se te cruzaría asfixiarlo. Eso sí, se tendría que vender un "kit" completo, incluyendo una evolución por edades. Eso haría el invento más atractivo para el comprador. Creo que en este siglo y en nuestras sociedades occidentales, esto puede funcionar. Eso sí, no trates de parir uno de estos que si se queda sin batería te puede quedar atrancado.

lucía:Qué bárbaro! Es como un spa para bebés, con música tranqui y también MÁS MOVIDA!!, y satisface sus necesidades de aprendizaje, buenísimo.
Qué importante es que el bebé esté TRANQUILO, no? Por qué siempre tantas ganas de que esté tranquilo. Además, gracias a este producto definitivamente la madre ya no es necesaria, entonces, MATENLA! De hecho, apenas el niñito pueda salir de esa especie de licuadora seguramente quiera matar a su madre, al grito de: "Creías que no me daba cuenta que no eras vos la que me abrazaba!".
No deberían perfeccionar la función en la que la sillita esté en el suelo? La madre tiene que mover el brazo para mecerlo, demasiado trabajo.
Ya sé! Creo que no es un bebé! Es un osito! Embalsamado. (Se le vieron las orejitas, qué descuido.)

Gustavo escribió:
Falta el botón que lo eyecta hacia el infinito si llegara a llorar después de todo...

Reflexo Materna, por facebook:le faltaría una protesis de silicona que se le meta en la boca automaticamente si es que el bebe se le ocurre llorar, no??? ahi si seria completo!!! me parece que le faltan accesorios! jajajaja

Mariana Galán Barlo, por facebook:De terror si, pero lo mas triste es que hay mercado para estas cosas porque hay mujeres que tienen hijos como si fuera una "etapa" mas de la vida que cumplir y despues no saben que cuernos hacer!!!!!
Salvo usarlos como chivos expiatorios pa ...ra todo lo dificil que les toca vivir!
No hay demos quew enseñen a vivir emocionalmente y transmitir ese conocimiento?????

Julia, por facebook:jajaja, pobrecitos nuestros bebés, cada vez les damos menos bola!!! somos lo menos.

Debbie:Increíble la sillita del terrrrror. Me acuerdo que cuando Lari era chiquita a toda costa todos (familiares varios, incluyendo suegra y cuñada, tíos, amigos...) me decían que consiguiera una sillita de esas así Lara se entretenía y yo tenía los brazos libres. Y yo estaba tan agotada como feliz con Lari en mis brazos así que nunca les di bola. ¿Tantos años esperando tenerla para dejarla en una sillita del terror? De ninguna manera.

Florencia: Estamos todos muy limados!!
Para qué querés tener un bebé si no lo vas a querer tener en brazos!!!!!
falta un cochecito que te pasee solo al chico, con gps y control remoto y ya está no? Así, "podemos seguir con nuestras vidas"
en fin.... no comments

Sara:
no salgo de mi espanto!!! parece una publicidad dentro de un programa de Capusotto!!!!!!!!!! sos graciosa escribiendo el relato!!
no puede ser verdad, lo diseño una computadora con inteligencia artificial o el verdadero hijo del repollo?!?!??!?!
qué desastre por Dios, y ella chocha lee un libro mientras a su hijo lo acuna el robotito, yo le daría el libro para leer al robot y me quedaría con el bebé a upa mirando el techo!!!

Nicolás: siniestro.
María Laura:La verdad que el producto es "genial" y excelente!!! tiene todo lo que necesita para una mamá que eligió programar su cesárea y ya que estamos hacerse una lipo (es la última moda hacer ambas cosas en la misma operación) además quiere mantenerse con la tintura y las manos impecables (si es posible extensiones y uñas esculpidas también), luciendo la última colección de Kosiuko y tomando sol mientras se toma un cafecito en las veredas de Palermo Hollywood...
Hay muuuuuchas más de esas madres (lamentablemente para las futuras generaciones) que de las que hicimos el Materpater y elegimos parir "fisiológicamente".... así que desde mi mirada marketinera es "perfecto" y hay público target a rolete para ese producto, se deben estar cansando de venderlo!!!
En este mundo hay mercado para todo, aunque nos duela, y pensemos la felicidad que se están perdiendo estos bebés de mercado...
El producto es "ergonómicamente correcto" al bebé se lo ve "cómodo, mullidito, tranquiiiiilooooooooo!"!! hasta puede elegir que quiere escuchar (lo bueno del MP3 es que la madre la puede grabar su voz para que de alguna forma algún día la reconozca)
No podemos renegarnos de la sociedad de consumo, es una mierda, pero existe y seguirá existiendo mientras hayan madres que crean que tener ese producto es la "solución" a sus problemas de crianza...
Si las máquinas ya hacen de todo, porque no acunar y arrullar al bebé??? Era lo único que faltaba hacer!!!!
Realmente Gracco no deja de sorprenderme encuentra siempre una necesidad insatisfecha para diseñar el producto justo a la medida!!! "Congratulations"!!

Carla:Por Dios!! Que mal estamos!! Pensa que antes de lanzar un producto al mercado un monton de gente hace un plan, elabora una estrategia, o sea trabaja durante un buen tiempo. Que habra en la cabeza de esas personas? Y en el corazon? Pienso en que seguro tienen "muy poca Mamá" en su interior, en su alma. Me da mucha pena. Este videito me hace reflexionar una vez mas acerca del importante rol que tenemos las mamás y los papás. A nuestros hijos podremos comprarles el ultimo juguete o no, podremos llevarlos a Disney o no, no importa eso. Lo unico que importa es que se llenen, se sacien de MAMÁ y PAPÁ, o sea de Amor del de verdad.

lunes, 13 de septiembre de 2010

lactancia interrumpida: yo acuso a los pediatras.

Este es un intercambio de mails de madres que están nucleadas en mi lista de correo de lactancia.


Hola Melina!
Te escribo porque estoy muy enojada. Estoy enojada con todas las personas que convencen a las madres de interrumpir la lactancia, familiares, amigos, compañeros, y principalmente profesionales de la salud.
Te cuento lo que me pasó: me llama mi prima que está por volver a trabajar después de la licencia por maternidad, su beba tiene 3 meses y medio y me consulta sobre el uso del "sacaleches" porque como ella sabe me saco leche desde que volví a trabajar. Y me dice que me pregunta a mi qué opino porque dice que soy la única defensora de la lactancia, de todas las mamás amigas que tiene, compañeras de trabajo, familiares etc parece que soy la única y entonces no dice que no está segura de qué hacer. ¿Cómo puede ser?! Por otro lado me cuenta que la pediatra le dijo que "total ya le dió 3 meses asi que no importa si ya no le da más" y que también le dijo que podían agregar "un yogurcito" a la tarde asi se saltea esa toma. También me dijo que en su trabajo no tiene un lugar donde pueda sacarse leche tranquila.
No entiendo cómo llegamos a esto a que alguien, en este caso yo, tenga que "defender" la lactancia. ¿No debería ser al revés? ¿Qué pasa con los profesionales? Se supone que los pediatras son los que más saben del cuidado de nuestros hijos y las madres confían en su opinión "profesional" y mucho más siendo primerizas. (nota mía, es curioso que ignoren tan soberanamente las recomendaciones de la OMS)
Yo cambié 5 veces de pediatras desde que nació mi bebé que hoy tiene 11 meses, todos tenían opiniones diferentes acerca del cuidado del bebé y de la lactancia. Finalmente elegí al pediatra con el que menos estaba en desacuerdo, pero sigo sin estar de acuerdo con muchas cosas. Y tengo que evitar decirle otras, como que por ejemplo mi bebé sigue durmiendo con nosotros. Y mi pediatra también me dice cada vez que puede que si me da mucho trabajo sacarme leche que le de leche de fórmula que "es lo mismo" y que prepare las papillas (nestum, avena) con eso.
En mi trabajo cada vez que me ven con mi lunchera me preguntan ¿"hasta cuando le vas a dar la teta a ese nene?" ¿"por qué no le das leche de cajita?". Y menos mal que le sigo dando la teta: Mi bebé acaba de tener varicela y durante 2 semanas no quiso comer nada que no fuera teta por las pústulas en la garganta, en la boca y la fiebre obviamente, y no bajó ni un gramo. Además, como te conté en otras oportunidades, no quiso incorporar los semisólidos hasta los 9 meses casi 10 y tiene un peso y una talla perfectos.
Ayer me mandaron una nota de la guardería que decía que "por favor en casa le hagamos menos upa para que esté mejor en el jardín"... pago $1100 de guardería, eso ¿no cubre un poco de upa y cariño?
Llega un punto que ya no me gasto en responder, yo solo les sonrío y sigo haciendo lo que me parece.
Pero igual me pregunto ¿qué pasa con todo el mundo? (somos varios los uqe nos preguntamos lo mismo, caro)
Perdón por el enojo pero yo se que vos me vas a entender
Un beso
Caro



Dios mio! Decile a esta mamá que por favor, aunque sea la única, no se rinda. Sera mas trabajoso para ella, pero si nos mantenemos firmes en nuestras convicciones, a la larga, y porque todas somos unas "guerreras cabeza dura", nos van a escuchar. Tengamos claro que, mas alla de quien tenga razon o no, lo que esta mal es que los demas anden por ahi diciendonos lo que tenemos que hacer. Bajando linea de lo que supuestamente esta bien o mal. Tenemos que enseñarles a los demas el verdadero sentido de la palabra RESPETO. Nada mas y nada menos.
Yo te respeto a vos que das mamadera desde el primer dia de vida de tu bebe, vos respetame a mi que le di teta a mi hija hasta los 2 años y 10 meses. Una no es mejor que otra solo por ese acto. Ahora, si una de estas 2 mamas se guio por lo que "hace todo el mundo" y la otra se guio por su instinto y por la informacion que busco, entonces simplemente hay una mama boluda y otra piola. Adivina cual es cual!!???? Volvi de Japon con los tapones de punta!!!
Besos, Mel. Love u!

Carla Di Sí o-o Di Signer


Increible. Muchas veces sentimos que remamos contra la corriente. ¿Por qué la gente de afuera se siente con mas autoridad que uno para decidir sobre como cuidar mejor a nuestros hijos?!
belén

Hola Melina! lei la nota de Caro! totalmente enojada y con mucha razon!
Creo que es por eso totalmente necesario unirse a grupos de lactancia y crianza..
no solo para tener acceso a informacion sino tambien para tener un apoyo...
es fundamental para la madres (primeriza en mi caso) tener un apoyo...
porque terminas sintiendo una soledad terrible.
Todo mi apoyo espiritual para Caro!
adelante con la teta!!!
Saludos
y gracias por compartir toda esta informacion!!!
Sol

Hola Mel: Si efectivamente a mi tambien me pasa, todo el mundo me pregunta cuando la dejo de amamantar a Juana, que hoy ya tiene 1 año y 6 meses. Gracias a Dios mi pediatra, Lucila Fernie, si bien no es del todo 100% de mi onda, me super respeta y apoya constantemente lo cual ha sido un gran alivio.
Ahora llegué a un momento en que estoy bastante agotada fisicamente y entre el laburo , Juana y la casa, me cuesta mantenerme fime cuando todos me dicen, mirá cómo estás? etc.. Pato, mi marido ya está preocupado, y si le sumás el hecho de que sigo a cuasi dieta (restringida) de lacteos por la alergia a la proteina de la leche de Juana, ya están todos diciendome más a menos que me voy a quedar sin dientes o lo que fuera! jajaj Pero seguimos!!!!
De todos modos, yo creo que siempre hay que apoyar la lactancia desde un lugar super respetuoso del otro, y no desde un lugar heroico o lo que fuere. EN el caso de la prima de esta chica creo 100% que hay que fomentarle que siga porque le bebé es muy chiquito y le va a hacer bárbaro seguir, pero hay veces, en que una vez ya crecidos los bebés, es la madre la que ya no puede más o que inconscientemente quiere ya dejar, y ahi creo que uno debe dejar el espacio a que esa madre deje de amamantar SIN CULPA porque hay mamás que no tienen la misma fuerza que uno. (me pasó con una amiga)
Para mi el amamantamiento ha sido y es lo mejor que nos pasó a Juana y a mi, a ella en alimento, en amor, mimos, presencia materna, y si a eso le agreguas el hecho de que los pezones cada uno tiene un chackra y por ahi le pasas a tu bebé energia! esto es vital, con lo cual más completo imposible.
Pero el tema es super delicado porque nuestras madres o cualquier madre que en general no haya amamantado mucho, no te va a apoyar demasiado. POr la simple razón de que al ego humano le cuesta decir que lo mejor para un bebé es aquello que uno como madre no le dió!!!!
Por eso, en mi humilde opinión, creo que hay que apoyar amorosamente a las madres, pero dejandolas ser y decidir sin culpa.


Te mando un beso enorme, y te debo una anécdota sobre lo que me dijo una médica capa biogenetista que fui a ver por mi pero que el consulté por mi salud y el amamantameinto de juani, muy lindo pero un poco largo, si puedo ir el 24 lo cuento!!!


Besotes Poly


Es incrible pero lo que escribe Caro es tal cual ... la verdad es que solo nosotras las mamas que sabemos que dar el pecho es mejor
que cualquier otra cosa ..mejor que las famosas leches inventadas , mejor que una manzana porque lamentablemente esta todo
curado y lleno de pestisidas Ya ni la manzana es natural .... con lo cual cuando paso por situaciones asi me siento una genia ...
porque veo cuanta ignorancia hay en la mayoria de la gente y cuan caro le sale con la salud de sus propios hijos
que te dicen mi nena se enferma re seguido como si ellos no tuvieran nada que ver con eso ...
la semana pasada en la puerta del jardin me dice una mama ayyy estoy re feliz porque vengo de vacunarnos la vacuna a la nena de sarampion me vacune yo .... la lleve a comer al mc donald y la dejaba en el jardin ... yo tenia ganas de decirle si le das mc donal no hay vacuna que te salve ! jejeje pero bueno intento hacerme la boluda aunque me dan mucha pena esos chicos porque tienen hasta la carita de enfermos ,palidos,ojerosos siempre tristes , que no se quieren desprender de los brazos de las mamas .. les imponen horarios no los dejan dormir siesta porque ellas a la noche quieren que a las 20.00 esten dormidos para cenar tranquilas con su marido jeje es de locos! los chiquitos tambien levantan sus defensas cuando necesitan descansar

Vito tiene 2 años y 4 meses Toma Teta todo el dia ... varias veces al dia y para dormir y al despertar .Duerme con nosotros y no es porque sea mi hijo pero es el nene mas feliz que hay , super vital ,muy seguro .... Entra al jardin corriendo y me pide volver cuando lo busco no se quiere ir del aula jeje super independiente No es lloron esta siempre contento y darle la teta fue lo mejor que nos paso , el mejor calmante ... y la vacuna contra todo . en fin no se porque a la gente le cuesta tanto , con ver un poco como viven y estan los demas podrian mejorar un poco

en fin decile a Caro que parece que una esta sola con esto pero por suerte hay mas mamas de las que creemos que pensamos iguales
que yo tambien pase x comentarios y enojos con pediatras ....
besos
Fer

Hola Mel como estas??
La verdad es q ya estoy tan cansada de q t digan lo q tenes q hacer con tu hijo... es una locura
Hasta la gente q no tiene hijos t dice lo q debes hacer, lo escuche de amigos muy intimos... " es facil son tres pasos dormirla a juana" no la tengas tanto en los brazos q se va a malcriar" " la tenes todo el dia en la teta" " t usa de chupete"" etc... QUE LA CHUPEN!!! perdon por la expresion pero q pasa?? el ser humano no se aguanta brindarle todo el amor a un bebe... entregarse por completo al otro, dejar por unos ratos el ego!!! Entender la conexion y la necesidad de los bebes...???
Siento q si antes me parecian una cagada lo q la medicina ortodoxa t dice, t enseña, ese adoctrinamiento, esa busqueda de gente sin sentimientos, sin poco lugar para pensar... NORMAS... el ultimo paper de la academia americana de pediatria...POR DIOS... nosotros no tenemos nada q ver con EEUU... BASTAAAAAAAAAA.
NO somos muñecos, no somos tontos!!! es muy perverso todo... este sistema no da lugar a tiempos para maternar... una cagada!! y despues es como decis vos se crian bebes q se aprenden a joder, ni hablar q sean jodidos.
Una vez o va muchas veces vienen mamas al consultorio con la señora q cuida a sus hijos porq no tiene ni idea q le pasa a su hijo... ufffffffffffff y asi miles!!!En las guarderias bebes de 15 dias, como puede ser... una locuraaaaaaaaaaaaaaaa!!
Bueno nosotras tamos tratando de cambiar todo eso, lo siento, me parece muy copado seguir los instintos de cada una... es un momento tan groso el q estoy viviendo, tan sensible!!
Ver como juana se duerme en la teta, en mis brazos, su carita, su mirada...
Bueno Mel t dejo porq sino voy a explotar ja!
T mando un beso gigante
Nos vemos el 24 en el encuentro
Nadia

Sumo mi respuesta: Creo que no todos estamos mental y fisicamente abiertos a despertar de la Matrix!!!!!!!!!!!!! Cuántas veces me siento así en este camino de ser madre... No puedo creer que otros no vean, sientan, vivan, lo que yo y mi bebé, ya de 1 año y 8 meses vivimos cada vez que tetamos!!!!! Siempre pienso si le doy la teta por él o por mí, siendo un poco egoista incluso, por lo que yo siento al darle mi leche. No esperar a veces que te pida, sino ofrecerle, cortar con la rutina, con momentos estresantes del día, sentémonos, acostémonos y compartamos este momento de labios, pezones, leche, sonrisas, fiaca, miradas... A veces no puedo creer que algunas madres se pierdan de darle la teta a sus hijos, ni hablar de los hijos que ni conocen lo que es tomar teta como yo. Cuando amamanto a mi hijo tambien tomo la teta con él, por la que no tuve.
Gracias
Paola

viernes, 27 de agosto de 2010

"Amamantar en la tierra de Genghis Kahn"


“Amamantar en la Tierra de Genghis Kahn”-Lactancia materna en Mongolia. Texto de Ruth Kamnitzer traducido por Ana Isabel Chinchilla
24 Agosto 2010 por Nohemí

Artículo publicado originalmente en www.drmomma.org


Ruth Kamnitzer
Hay en Mongolia un dicho muy utilizado que afirma que los mejores boxeadores toman leche materna durante al menos seis años, afirmación muy seria para un país en el que el boxeo es el deporte nacional. Me trasladé a Mongolia cuando mi primer hijo tenía cuatro meses y viví allí hasta que cumplió tres años.

Criar a mi hijo en aquellos primeros años en un lugar donde la actitud hacia la lactancia materna es tan radicalmente diferente de las costumbres que prevalecen en Norteamérica me abrió los ojos a una visión completamente diferente de cómo podría ser todo. Los mongoles no solamente prolongan la lactancia materna, sino que además lo hacen con más entusiasmo y menos inhibiciones que casi nadie de los que había conocido hasta entonces. En Mongolia, la leche materna no es sólo para bebés; no se trata sólo de nutrición y definitivamente no es un tema sobre el que se imponga la discreción. Es la madera de la que estaba hecho Genghis Khan.

Al igual que muchas madres primerizas, no había pensado demasiado sobre la lactancia antes de tener a mi bebé, pero minutos después de que mi hijo Calum saliera, se agarró a la teta y durantelos siguientes cuatro años no parecía nada dispuesto a soltarse. Tuve suerte, porque en muchos aspectos la lactancia nos resultó sencilla: ninguna grieta en el pezón, rara vez un pecho ingurgitado. Mentalmente las cosas no eran tan sencillas: a pesar de lo mucho que amaba a mi bebé y disfrutaba del vínculo que nos ofrecía la lactancia, en ocasiones resultaba insoportable. No estaba preparada para la magnitud de mi amor por él ni para la intensidad de su necesidad de mí en exclusiva y de mi leche. “No le permitas que te convierta en un chupete humano”, me advirtió una enfermera canadiense pocos días después del nacimiento de Calum, que mamaba a todas horas, pero yo repasaba todos los posibles motivos de su llanto (¿gases?, ¿pañal? ¿infraestimulación? ¿sobreeestimulación?) y por lo general acababa dándole teta de nuevo. Me preguntaba si hacía bien.
Entonces me trasladé de Canadá a Mongolia, donde mi marido llevaba a cabo unos estudios sobre vida salvaje. Allí los bebés están siempre envueltos en varias capas de gruesas mantas, atados con cuerda como un paquete que no quieres que se rompa en el correo. Cuando un paquete murmura, se le pone un pezón en la boca. No se les cambia muy a menudo y nunca se les hace eructar. No hay ni siquiera una manos en las que poner un sonajero. Por supuesto, no hay ratitos boca abajo. Los niños permanecen envueltos hasta al menos los tres meses, y cada vez que emiten un sonido, se les da de mamar.

Esto resultaba interesante. A los tres meses, los bebés canadienses ya tienen actividades sociales, incluso natación. Algunos aprenden a “calmarse solos”. Yo daba por sentado que había muchos motivos por los que un bebé podía llorar y que era mi trabajo averiguar la razón y darle la solución adecuada. Pero en Mongolia, aunque los bebés puedan llorar por muchos motivos, sólo hay una solución: leche materna. Dejé de darle vueltas e hice lo mismo.

En Canadá la lactancia materna aún está rodeada de cierto misticismo, pero en realidad no estamos demasiado acostumbrados a ella. La lactancia se realiza en casa, en grupos de lactancia, quizá en alguna cafetería: rara vez se ve en público y desde luego nosotros mismos no tenemos recuerdos conscientes de haber sido alimentados con pecho. A esta íntima actividad entre madre e hijo se la trata con secretismo y educadas miradas hacia otro lado, y se considera casi igual que las demostraciones públicas de intimidad en una pareja: no es tabú, pero sí que causan ligera incomodidad y son educadamente ignoradas. Cuando el silencioso y angelical recién nacido se convierte en un niño activo resuelto a comunicar a todo el mundo lo que está haciendo a cada momento, bueno, entonces esos ojos se apartan con mayor rapidez e intensidad, a veces con el ceño fruncido.

En Mongolia, dar el pecho en público, en lugar de relegarme a la sección de “sólo mamás”, me puso decididamente en el centro de atención. Su práctica universal de dar pecho en cualquier momento y lugar, así como la cercanía en la que la mayoría de los mongoles vive, implica que todos están acostumbrados a ver un pecho en acción. Les alegraba ver que hacía las cosas a su manera (que por supuesto era la manera correcta).

Cuando daba pecho en el parque, las abuelas me brindaban sus historias sobre cómo habían alimentado a sus doce hijos. Cuando daba pecho en el asiento trasero de los taxis, los conductores levantaban sus pulgares por el retrovisor y me aseguraban que Calum se convertiría en un gran boxeador. Cuando paseaba por el mercado acunando a mi hijo en mis brazos mientras mamaba, los comerciantes me hacían un sitio en su puestos y le decían al niño que se lo bebiera todo. En lugar de mirar a otro lado, la gente se inclinaba sobre Calum y le besaba la mejilla. Si se soltaba de la teta en respuesta a la atención recibida, dejando mi pecho chorreando y completamente expuesto, no pasaba nada. Nadie se quedaba mirando, nadie apartaba la vista: simplemente se reían y se limpiaban la leche de la nariz.

Desde que Calum tenía cuatro meses hasta los tres años, allá donde fuera, oía una y otra vez lo mismo: “La teta es lo mejor para tu bebé, lo mejor para ti” La aprobación constante me hacía sentir que hacía algo importante que interesaba a todos; exactamente la clase de aprobación pública que *toda* madre reciente necesita.

Para cuando Calum cumplió los dos años, yo ya había descubierto lo útil que podía ser la lactancia materna. Nada hace que un niño se duerma más rápido, alivia el aburrimiento de un largo viaje en coche, o calma una tormenta que se cierne, tan rápidamente como una poca leche calentita de mamá. Es la ayuda más útil para la madre perezosa, y yo creía que le daba todos los usos, pero los mongoles lo llevaban más lejos.

Durante los inviernos mongoles, pasaba muchas tardes en en el yurt de mi amiga Tsetsgee, huyendo del frío glacial de fuera. Fue instructivo comparar nuestras técnicas de crianza. Cuando estallaba una pelea por los juguetes entre nuestros hijos de dos años, mi primera reacción era restablecer la paz distrayendo a Calum con otro juguete al tiempo que le explicaba los principios de compartir las cosas, pero esto llevaba tiempo y una media de éxito de tan sólo un cincuenta por ciento, En el restante cincuenta por ciento de veces, cuando Calum no quería dar su brazo a torcer y su frustración aumentaba hasta el punto de ebullición, lo cogía y le acunaba en brazos para amamantarle.

Tsetsgee tenía una táctica diferente. Al primer murmullo de discordia, se levantaba la camisa y empezaba a menear sus pechos con entusiasmo, diciendo: “¡Ven aquí, cariño, mira lo que tiene mami para ti!” Su hijo apartaba la vista de los juguetes para mirar las dianas de sus pechos y siempre se iba hacia ellos.

¿Media de éxito? Cien por cien.

Para no ser menos, adopté la misma estrategia. Allí estábamos, dos madres agitando los pechos como strippers compitiendo por atraer a un cliente. Si los abuelos estaban por allí, se unían a la representación. Los pobres críos no sabían a dónde mirar: la tranquilizadora plenitud de los pechos de sus madres, los mustios pechos planos de la abuela con su larga experiencia, o el extraño montón de carne que el abuelo se agarraba en su envidia de pechos. Por mucho que lo intente, no puedo imaginarme una escena similar en una reunión de la Liga de la Leche.

En mis clases prenatales en un pequeño pueblo de Canadá, donde nació Calum, nos mostraron la lactancia materna con un vídeo de una madre sueca de aspecto especialmente atlético, que daba pecho a su niño pequeño mientras esquiaba. La clase se estremeció: “Claro que es genial para los bebés, pero cuando ya empiezan a hablar y a andar…?” Todas parecían de acuerdo. Yo me callé.

Me tocó a mí sorprenderme cuando una de mis amigas mongoles me dijo que había tomado leche materna hasta los nueve años de edad. Me quedé tan boquiabierta y estupefacta que al principio me lo tomé a broma. Viendo ahora que mi hijo se destetó justo después de cumplir los cuatro años, me avergüenza un poco mi inflexible incredulidad. Aunque nueve años sea bastante edad para tomar el pecho, incluso para los mongoles, no está fuera del rango.

Aunque no siempre era fácil hablar sobre conceptos como “destete voluntario” con mongoles debido a la barrera idiomática, dar pecho “a largo plazo” parecía ser la norma. Nunca conocí a nadie que diera pecho a dos niños, lo cual me sorprendió, aunque debido a que los intervalos entre hijos son bastante largos, la mayoría de los niños dejaban de mamar entre los dos y los cuatro años.

Según UNICEF, en 2005 el 82 por ciento de los niños de Mongolia seguían con lactancia materna entre los 12 y los 15 meses y el 65 por ciento seguían entre los 20 y los 23 meses. El último hijo parece que simplemente continúa, de ahí la niña de nueve años que tomaba pecho, y si la sabiduría popular no se equivoca, de ahí la fama de Mongolia en el boxeo.

Cuando a los tres años Calum seguía tomando pecho con el entusiasmo de un recién nacido y yo me preguntaba cómo surgiría el destete, sentí curiosidad sobre qué animaba a los niños mongoles a destetarse solos. Algunas madres me dijeron que su hijo simplemente perdió el interés. Otras dijeron que la presión de grupo tuvo que ver, (he oído a adolescentes mongoles burlarse de otros diciendo “¡Quieres los pechos de tu mami!” del mismo modo que se dice “¡Corre con tu mamá!”). Cada vez más a menudo, las obligaciones del trabajo obligan a destetar antes de lo habitual: los niños a menudo pasan el verano en el campo mientras que la madre se queda en la ciudad trabajando, y durante esta larga separación a la madre se le retira la leche.

Mi amiga Buana, de veinte años, me contó su lactancia, digna de medalla de oro: “Me crié en un yurt lejos, en el campo. Mi madre siempre me decía que me la bebiera toda, que era buena para mí. Yo creía que todas los niños de nueve años lo hacían. Cuando fui al colegio, lo dejé.” Me miró con un brillo travieso en los ojos “ Pero aún me gusta beberla a veces”.

Destetarse me parecía un suceso bastante definido. Siempre esperé que, en algún momento, las tomas se reducirían y seguirían reduciéndose hasta que cesaran por completo. Se me retiraría la leche y ya está. Bar cerrado.

En Mongolia no sucede así. Hablando de lactancia con mi amiga Naraa, le pregunté cuándo su hija, entonces de seis años, se había destetado. “A los cuatro años” me contestó, “a mí me entristeció pero ella no quería tomar teta más”. Entonces Naraa me dijo que la semana anterior, cuando su hija había vuelto de una larga estancia en el campo con sus abuelos, quiso tomar teta. Naraa la complació “Me imagino que me había echado mucho de menos” explicó, “y fue bonito. Por supuesto, yo no tenía leche, pero no le importó”.

Pero si “destetar” significa no volver a beber leche materna, entonces los mongoles nunca se destetan del todo, y esto es lo que más me sorprendió de la lactancia en Mongolia. Si los pechos de una mujer están ingurgitados y su bebé no está cerca, irá sencillamente preguntando a sus familiares, de cualquier edad o sexo, si quieren beber. A menudo las mujeres se extraen una taza de leche para sus marido para darles un capricho, o dejan una poca en el frigorífico para que cualquiera pueda servirse.

Aunque todas hemos probado nuestra propia leche, le hemos dado a nuestras parejas para que la prueben, quizá hemos echado una poca al café en una emergencia ¿no?, no creo que que muchos de nosotras la hayamos bebido a menudo. Sin embargo a todo mongol al que he preguntado me ha dicho que le gusta le leche materna. El valor de la leche materna está tan reconocido, tan firmemente arraigado en su cultura, que no se considera como algo sólo para bebés. La leche materna se usa comúnmente de forma medicinal, se les da a los mayores como una cura para todo, se usa para tratar infecciones oculares así como (dicen) hacer más blanco el blanco de los ojos y más intenso el marrón del iris.

Pero sobre todo, creo que los mongoles beben leche materna porque les gusta el sabor. Una amiga mía occidental que se extraía leche en el trabajo y dejaba la botella en el frigorífico de la oficina se encontró un día la botella medio vacía. Ella se rió: “¡Sólo sospecharía de que mis compañeros se beban mi leche en Mongolia!”

Vivir en otra cultura siempre te obliga a re-evaluar la tuya. No sé cómo hubiera sido dar pecho a mi hijo en sus primeros años en Canadá. La avalancha de observaciones positivas que recibí en Mongolia, así como la aceptación sincera de dar el pecho en público simplemente me asombró, y me dio la libertad de criar a mi hijo de una manera que me parecía natural. Además de las pequeñas diferencias en nuestras costumbres de lactancia, los detalles de cuánto y cuándo, concluí que había una diferencia más grande en nuestros métodos de crianza.

En Norteamérica valoramos tanto la independencia que aparece en todo lo que hacemos. Sólo se habla de qué come tu bebé ahora, y a cuántas tomas has reducido. Incluso aunque no seas la que hace estas preguntas, es difícil escapar de su impacto. Además se venden tantas cosas para que tu hijo se entretenga solo y te necesite menos que el mensaje es claro. Sin embargo en Mongolia, la lactancia no se identifica con dependencia, y el destete no es una meta. Saben que sus hijos crecerán; de hecho, un niño mongol normal de cinco años es mucho más independiente que uno occidental. No hay prisa por destetar.

Probablemente lo más valioso de criar a mi hijo en Mongolia fue que me di cuenta de que hay un millón de maneras de hacer las cosas, y que yo podía elegir cualquiera de ellas. Durante la lactancia de mi hijo tuve varias dificultades, y tomé y deseché ideas y prácticas en mi intento de forjar mi propio estilo. Me alegro de haber amamantado a Calum tanto tiempo: fueron cuatro años al final. Creo que la lactancia fue lo mejor para mi hijo, y que tendrá una influencia duradera en su personalidad y en nuestra relación.

Y cuando gane la medalla de oro de boxeo en la Olimpiadas, espero que me lo agradezca.

Nota: 1. UNICEF Childinfo, “Monitoring the Situation of Children and Women: Infant and Young Child Feeding (2000-2007)” (January 2009): www.childinfo.orglbreastfeeding_countrydata.php

Ruth Kamnitzer vivió durante tres años en una tienda tradicional de tela en la campiña mongola mientras su marido,Steve, llevaba a cabo unos estudios sobre el gato de Pallas de Asia Central. Es licenciada en Conservación de la Biodiversidad y hoy en día vive en Bristol, Reino Unido, con Steve y Calum.

jueves, 19 de agosto de 2010

¿Que es el parto?

Es la fase más breve. fácil y segura de la reproducción y la única que dado el caso, la mujer puede realizar completamente sola, aunque ello no sea deseable, no por la parte física, sino por la psicológica por que el parto provoca una emoción tal que es conveniente compartirla con una persona amada, el más indicado de todos, el padre del bebé que es bueno que comparta su nacimiento.

El parto es la etapa final, aquella en la que se recoge el fruto, es resultado de una larga espera, el momento en que se satisface una gran ilusión.

Físicamente el parto no es más un simple trabajo muscular. Las fibras longitudinales del útero “tiran” del cérvix hacia arriba, hacia el fondo del útero, al contraerse, al disminuir su longitud, obligando a que el cérvix se acorte, se aplaste y desaparezca, absorbido por la parte inferior del útero.

Tras un descanso más o menos breve, las contracciones se reanudan, dirigidas siempre hacia arriba y van agrandando poco a poco el orificio cervical, a lo cual 0’¡contribuye la bolsa de las aguas, cuya elasticidad permite que se insinúe dentro del orificio, por pqueño que éste sea. A cada contracción, el útero se achata y se achica y el agua que no puede achicarse, lo que hace es tomar presión y expande la parte de la bolsa introducida en el orificio, con la fuerza, hidraúlica, a la vez suave y potente del líquido contenido en ella.

Cuando la dilatación alcanzaun diámetro entre 8 y 10 centímetros, si el feto está en su debido posición, el primer diámetro que presentará a su salida será el bioccipital,

unos 7 cm. Si la mujer permanece en pie, el feto caerá en la vagina por su propio peso, lubricado por el vernix caseoso, destinado, precisamente a hacerle resbalar.

La vagina es de un tejido sumamente elástico y está separada del recto por un tabique muy delgado. La parturiente tiene la sensación de tener el recto eccesivamente occupado y su cerebro se persuade también de ello. A la salida del feto, el útero se retrae, las contracciones cesan y hay en período de descanso, como una recuperación de fuerzas preparándose para el alumbramiento, pero la mujer está muy molesta, con aquel bulto empujando contra el tabique recto/vaginal y el cerebro decide dar la orden de vaciar el recto, por el mismo procedimiento que se vcía siempre, por la contracción de los músculos abdominales, presionan de afuera a adentro y obligan al feto a salir, pero éste se encuentra en su camino un obstáculo inesperado: por la parte posterior ha salido ya parte de la cabeza, desde la coronilla al cogote, pero por delante, la cara está aún dentro de la vagina. Las eminencias frontales se han quedado paradas contra el pubis materno. Para colmo de desdichas, el periné ha decidido convertirse en canal blando del parto e impide la salida del feto, colocándose, como si fuera un capuchón sobre la cabeza fetal. ¡Vaya un problema! En el hospital lo arreglan rápidamente, con un buen tijeretazo, pero merece la pena pararse a pensar ¿por qué se comportará el periné en el parto de un modo tan extravagante?

El organismo humano es una máquina perfecta, todo vale para algo, cada órgano, cada parte del cuerpo, tiene una misión útil y concreta. Ya se sale que el periná es el suelo del abdomen que ejerce un importante papel coadyudando a sostener ensus debida posición las vísceras abdominales, pero esa intrusión en el parto, como para ne dejar salir al pobre feto, tratando de impedir o, por lo menos, retrasar su llegada a este mundo. Le di muchas vueltin en mi magín a este problema y, de repentehallé, como por milagro, la solución: La Naturaleza ha previsto que para el feto es un gran “choc” encontrarse, de pronto en un Mundo desconocido y, de momento adverso y a encargado al periné que se encargue de que el feto salga despacito, poco a poco, suavemente. ¡Pobre periné! Se juega la vida por evitar que el feto sufra al nacer bruscamente. ¡A me daba pena ver como que ponía pálido, transparente, casi como un cristal y tan frágil como si lo fuera! A todas las comadronas de mi época, nos enseñaban a proteger el periné, en la Escuela de Matronas, en las Maternidades de lasque entonces había varias muy buenas, lo aprendíamos unas matronas de otras, discutíamos si la maniobra de Olshausen era mejor o peor que la clasica de Bumm. Que periné quedara intacto, como si la mujer no hubiera parido, era motivo de orgullo profesional para todas y cada una de nosotras. Protegíamos los perinés con suavidad y amor, ibamos retirando, poco a poco nuestras manitas, mientras el periné se iba arrugando de nuevo y detrás de la frente surgían los ojos, la nariz, la boca y la barbilla del feto que salía como no por arte de birlibirloque, sino gracias a que el feto sabía hacer, sin que nadie se lo hubiera enseñado, aquellos cuatro movimientos, de rotacuón interna, flexión, deflexión y rotación externa, que todas habíamos estudiado. No sé si a mis colegas les pasaba lo que a mí, que me quedaba extasiada y maravillada al ver con cuantan precisión y limpieza los ejecutaban los fetos, ¡como si no fuera la primera y única vez que nacían, como si estuvieran acostumbrados a nacer, a respirar, a mamar! ¡¡Todo lo sabían hacer solos!! Siendo hijos de unas madres que no sabían parir, pero que tampoco tenían miedo, que soportaban estoicamente los dolores, que creíamos inevitables del parto y se olvidaban de ellos apenas tenían al bebé en sus brazos. ¡Que gratificante era ser matrona entonces, cuando el parto era un grato y alegre acontecimiento familiar, cuando cada bebé traía no un pan bajo el brazos, aunque buena falta nos hacía, sino sonrisas, amor y paz.


Consuelo Ruiz Vélez-Frías


Ha sido mujer, madre, matrona, , (ha fallecido en el año 2005) y nos ha dejado un legado de buen saber.

miércoles, 11 de agosto de 2010

UN PAPÁ, un señor papá.

Pienso, siento, escribo, mas que nada siento, escucho música y me salen tantas emociones!!!

Una amiga me dio una música muy linda que es música devocional. Supuestamente abre el chakra cardíaco, el del amor.

Me da ganas de escribir y transmitir lo que siento.

Parece que me conecto con mi ser, con mi interior y veo pura felicidad, privilegio de tener tantas cosas que por momentos pasan de largo como si fueran ya parte de todo, es que en realidad son parte de todo, pero un todo que se completa día a día y aveces se olvida de que existen tantos eventos individuales que logran formarlos.

Es increíble que Juana sea parte de mi, de ese "todo", es inmensa la felicidad que siento cuando la veo, cuando la huelo, cuando nos miramos a los ojos, cuando lo doy y me da un mimo. Me siento ENORME, me siento fuerte, quiero transmitirlo, quiero que lo sepa y que lo sepan todos.

Yo soy hijo, fui bebe. En cada una de estas sensaciones la siento a "ella" (mi mama Maria Estela), cada caricia que doy tengo la sensación que me lo esta dando "ella".
Estos últimos días, creo que en una parte de mi chakra encontré su amor y su cariño y también es parte de ese "todo".

De la madre que tengo al lado día a día (Maria del Mar) me enorgullece la entrega, la hermosura, la paciencia, también es parte del "todo" que me completa.

Estoy muy feliz y orgulloso de ser padre, ser hijo y de ser esposo de una mujer maravillosa!!!

Gracias al amor!!!, gracias a la vida!!!!

Papá http://princesitadeesmeralda.blogspot.com/

(y vean la peli)

lunes, 2 de agosto de 2010

Desnaturalizados

Comunicación Mensual Nro15- Julio 2010



“Desnaturalizados ”



Seguimos recopilando indicadores que denuncian la manera en que hemos alterado nuestra naturaleza.

La vida agitada, urbana, productiva y tecnológica viene atentando contra nuestra condición humana. Retomo para reflexionar el Boletín anterior dedicado al destete cuya temática -de apariencia femenina- involucra a todos. Confirmo con tristeza que en la Argentina el 78, 4% deja de amamantar antes de los seis meses. Un tiempo que toda evidencia científica e intuitiva confirma que es demasiado pronto. No me detengo a profundizar excepciones ni casos individuales que justifican un destete temprano. Hablo del promedio.

Surge una hipótesis y la comparto: el destete es un patrón vincular que da cuenta del apego con nuestras crías y cuando se vive de manera natural sienta bases de salud psíquica. Por el contrario, la manera en que se transita este proceso en la actualidad refleja una de las fuerzas que da origen a los padecimientos del hombre moderno.



Una vez más comprobamos que estamos intervenidos. No tenemos paciencia para respetar nuestros ritmos vitales. Cuesta vincularnos y sufrimos una alta tasa de “desnaturalización” que nos enferma.



Somos testigos de la intervención por todos los costados. En lo superfluo y en lo hondo: ecosistemas, nacimientos, pómulos y labios. Nos hemos dejado intervenir hasta en nuestros procesos más fisiológicos. Nos cuesta parir (el índice de cesáreas es francamente aterrador) y ni mencionar vivir conectados a nuestros ritmos internos. Somos cada vez más pobres para disfrutar de lo gratuito, y la vida es cada vez más cara.



Volviendo al destete, escuchamos incontables historias de mujeres boicoteadas para abandonar la lactancia. Falta de apoyo o simple desinformación. Infundados consejos médicos y psicológicos en nombre de la independencia, perversos intereses económicos de las leches artificiales, escasos modelos de maternaje con apego. Mujeres que pierden su poder y su derecho a dar la teta hasta que tengan ganas. Familias forjadas a entrar rápido al sistema mercantil perdiendo la gratuidad de la leche materna. Y el riesgo que supone la interrupción de ese fluido vivo que nos mantiene conectados piel a piel, haciendo gala de nuestra condición mamífera.

Podemos imaginar las primeras comunidades de hombres, y saber que la lactancia materna fue lo que mantuvo viva a la especie generación tras generación. Hoy pensamos que podemos prescindir o sustituir esta primera ligazón con tetina plástica y leche de vaca o cabra premium. Una madre primeriza preguntaba cual era la mejor leche para comprar para su bebé. La tuya. Buscamos afuera, y está adentro.

El destete es un proceso que lleva tiempo, y eso es lo que menos tenemos. Requiere respeto, escucha y estar atento a las necesidades de nuestros hijos. Cómo nos cuesta! Se ve claramente una falta de cultura de amamantamiento en las grandes urbes y cuesta integrar maternidad con trabajo.



Sin embargo, hay un grupo de mujeres que están trazando un nuevo surco.

Planteo un escenario con tono dramático pero al mismo tiempo algo esta pasando y se empieza a mover. La fuerza del péndulo que equilibra.



Un impulso que viene desde bien adentro y se manifiesta en diferentes voces y acciones. Se palpita por ejemplo en la cantidad de movimientos que revalorizan una vuelta a lo “natural” (ecología, alimentación orgánica, parto respetado, lactancia materna etc.) y en la toma de conciencia individual de que así no podemos seguir viviendo. Si continuaron leyendo hasta aquí imagino que pueden estar sintiendo algo parecido.

Lic. Carolina Gowland

Psicóloga

carolinagowland@gmail.com



TE: 1550251245

Si Ud no desea recibir esta comunicación, envíe un email a la dirección mencionada anteriormente, solicitando ser removido del listado.